viernes, 31 de octubre de 2014

Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga

 “ Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga”.  1 Corintios 10:12   

En esta primera parte se hace una comparación de lo que sucedió con el pueblo de Israel al pasar por el mar rojo para que no caigamos en las mismas acciones; Pablo habla acerca del bautismo que tuvo el pueblo en Moisés cuando paso el mar Rojo.   El término Bautismo procede del verbo griego baptizein, que significa sumergir, lavar, donde su simbolismo enfatizan los  efectos del agua como signo de purificación.  La pregunta que surge es  si el pueblo de Israel no paso por agua porque fueron separadas para que el pueblo lo hiciera en seco, a que bautismo se refiere Pablo en este capitulo?   .  Cuando los discípulos bautizaban a los nuevos creyentes, lo hacían basados en la aceptación de un cambio de vida. Y con el bautismo de Cristo quedo claro que  mas allá de un simbolismo, era la presencia misma del Espíritu Santo en nuestra vida.    En los dos casos, era  una forma publica de identificarnos como el pueblo de Cristo, así como nosotros fuimos bautizados con el Espíritu Santo, el pueblo de Israel estaban identificados con Moisés cuando cruzaron el mar rojo por medio de la fe  quien les animo a pasar el Mar rojo;  Cristo paso a través de la muerte y nosotros nos identificamos con El; ese es el verdadero bautismo; el bautismo por agua es un símbolo de lo que estamos creyendo; no es para salvación pero si para identificación, para comer del mismo pan que comió el pueblo de Israel, el pan que da vida que viene de Dios. 

En este capítulo,  Pablo nos muestran la actitud que debemos tener como cristianos ante nuestros deseos que deben estar bajo el dominio de Dios; el pueblo de Israel después de haber visto estas maravillas en el desierto, después de haberse identificado como pueblo de Dios, se sintieron  cansados, aborrecían el mana, querían mas y esto es considerado como codicia, querer mas de lo que se debe, satisfacer mas de lo que se necesita y anhelar tanto hasta el punto de la murmuración.  Esas actitudes nos separan de Dios, pues son contrarias a El, es orgullo el que nos hace muchas veces actuar en forma contraria a Dios.  Fueron muchos los que murieron del pueblo de Israel en el desierto por esta causa…  Ya habían pasado el mar rojo, ya habían tocado la libertad, pero sus deseos mas mundanos les hacia tropezar una y otra vez y sabemos que la paga del pecado es muerte, por eso muchos murieron en el desierto.   Pablo nos invita en este capitulo 10 a estar vigilantes en todo momento de nuestra forma de andar por la vida y así estar sensibles a la palabra de Dios.  El Espíritu Santo nos rearguye de pecado  e inmediatamente debemos confesarlo para que Dios nos perdone y no sigamos dando vueltas en la misma falta una y otra vez.  Tentaciones las tendremos, como el pueblo de Israel las tuvo en el desierto pero aquí en el versículo 13 dice que juntamente con la tentación tendremos la salida, entonces termina este versículo diciendo que huyamos de la idolatría.  Porque esas pequeñas faltas cometidas a diario, desembocan en idolatría:  al cuerpo, a nuestros deseos carnales, al objeto de nuestra codicia.  Por eso, dice que el que se sienta firme mire que no caiga, por que fueron muchos los que pensando que estaban caminando como pueblo de Dios, quedaron tendidos en el desierto por dar gusto a sus deseos sin estar sometidos a la voluntad de Dios.  Después de hacernos creyentes, queda un camino largo por recorrer, donde nuestra fe debe ser la única guía, nuestro alimento la palabra de Dios y todas las áreas de nuestra alma, sometidas a la perfecta voluntad de Dios.  Eso es para nuestro provecho, para alcanzar esa tierra prometida que Dios nos tiene preparada si creemos sin desmayar.

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